Cuatro consejos para ahorrar batería en tu Smartphone

La autonomía de la batería se ha convertido en un factor determinante tanto para la elección como para nuestra misma satisfacción de usuario, pues de poco sirve contar con un gran teléfono si a las 2 o 3 horas ¡nos va a dejar “botados”! o en su defecto además del mismo teléfono tengamos que cargar siempre su cargador, algo que ya es común pero no deja de ser incómodo, además siempre habrá algún día que lo olvidemos en casa.

Por ésta razón, siempre caben pequeños consejos, algunos obvios, otros no tanto, para alargar un poco más la duración de la batería, lo que podríamos traducir en más tiempo para disfrutar nuestro equipo y más vida útil para la batería.

1) Limitar las conexiones activas

Empezamos por el aspecto que más consume batería de nuestros equipos: Las conexiones activas: Aspectos como el Bluetooh y el Wi-Fi acaban rápidamente con la carga de la batería, por tal razón por omisión siempre deben están desactivados y usarse por demanda (esto es únicamente cuando lo necesitemos). Además es una buena práctica de seguridad.

También cabe aquí, aunque no es una conexión propiamente, el uso del GPS… que sin duda, es el “artilugio” que literalmente seca tu batería más prontamente, por lo que naturalmente debe permanecer inactivo siempre que no lo necesitemos.

2) Ajustar la configuración de pantalla

Quizás el segundo aspecto (luego de las conexiones) que más consume batería es la pantalla de nuestro Smartphone. Hay dos aspectos a abordar:

El primero y más importante es el brillo de la pantalla, si ajustamos el brillo lo más bajo posible (sin sacrificar la legibilidad por supuesto) seguramente obtendremos un ahorro considerable.

El segundo se basa en la teoría de la “generación de colores en pantalla” en el que básicamente se afirma que cuesta menos producir el color negro en pantalla (y por tanto ahorrando batería) que otros colores… siendo el blanco lo opuesto por supuesto. [1] [2]

Por tal motivo se recomienda usar un tema oscuro (pero no de luto) en nuestras móviles (igualmente sin sacrificar la legibilidad)… si se dan cuenta, los temas oscuros son una tendencia y no sólo está presente en los móviles más recientes sino también en los sistemas operativos modernos (Ubuntu. Vista y Windows 7 por ejemplo), ya que ésta teoría también aplica a los portátiles y en general cualquier pantalla LCD.

En este último punto quizás la diferencia no sea notable… pero ahorro es ahorro.

3) ¿En Stand by, Modo de vuelo o Apagado?

Una de las preguntas más frecuentes, es qué es más óptimo para el celular, por ejemplo, cuando vamos a dormir (si yo sé que muchos lo dejan encendido común y corriente).

En algunos sitios, más bien orientados a equipos Nokia hablan que es mejor dejar el equipo encendido común y corriente… pues el sistema operativo entra en modo Stand By (o de espera) optimizando el uso de energía.

No recomiendan apagarlo, dado que al igual que un computador el proceso de arranque exige gran cantidad de operaciones de cómputo gastando más batería de la que supuestamente se ahorraría permaneciendo apagado.

Sinceramente, no sé hasta qué punto pueda llegar a ser notable la diferencia, personalmente muchas veces dejo el equipo apagado a la hora de dormir son unas 7 horas… y me cuesta creer que el sólo encendido sacrifique más de 7 horas de no consumo en espera del equipo.

Sin embargo, hay un término medio, que no es apagado pero tampoco es completamente en Stand By, y se llama modo de vuelo. Este modo, diseñado especialmente para cuando volamos por los aires desactiva todas las conexiones (incluyendo la red celular, por lo que tampoco recibiremos ni podremos hacer llamadas) ahorrando significativamente bastante energía.

Por supuesto, esto aplica para los días que planeemos de descanso o que queramos dormir sin ser interrumpidos, mi periodo mínimo óptimo es de al menos 7 horas.

4) Cerrar aplicaciones activas

Los smartphones tienen la capacidad de ejecutar varias aplicaciones de forma simultánea, por lo que es común que a veces olvidemos cerrar un programa y éste quede abierto en segundo plano consumiendo tiempo del procesador y memoria.

Una buena práctica consiste en verificar que sólo permanezcan los programas que realmente necesitamos… y por supuesto cerrar al instante lo que ya no vamos a usar.

Siguiendo éstos sencillos consejos, (conste que en ningún momento dije ¡no use alguna función en particular! porque para eso es, para disfrutarlo) seguramente extenderás un poco más la vida útil de tu batería.

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Referencias:
[1] Blackle http://www.blackle.com/about/
[2] Energy Use and Power Levels in New Monitors and Personal Computers http://enduse.lbl.gov/Info/LBNL-48581.pdf

Imagen cortesía:
http://lifehacker.com/5375325/an-exhaustive-guide-to-saving-your-smartphones-battery